Linaje
El yoga es tan antiguo como la civilización. La filosofía y el método práctico del yoga se mencionan ya en los Vedas y en algunas Upanishads. El trabajo de compilación, sistematización y codificación de toda la filosofía del yoga en forma de aforismos es obra de Patañjali.
Patañjali fue un sabio de la antigua India. Su nacimiento se estima entre el año 500 y 200 AC. El nombre de Patañjali es una palabra compuesta: “Pata” caído, y “añjali”, el gesto (mudra) de juntar las manos en señal de oblación a Dios. Cuenta la leyenda que es un alma que encarnó deliberadamente en humano y luego de experimentar el sufrimiento logró finalmente trascender.
Plasmó su sabiduría en tres textos acerca de la gramática, la medicina y el Yoga. Este último conocido como “Los Yogasutras de Patañjali” se ha convertido en un referente fundamental para los estudiantes de yoga de todos los tiempos en todo el mundo. Consiste en 196 aforismos o sutras (pequeños textos precisos), que guían al practicante en el camino del autoconocimiento a través de la descripción de los ocho pasos (ashtanga) del yoga.
El segundo Sutra “Yoga citta vrtti nirodhah” describe el yoga como “el cese (o supresión) de las fluctuaciones de la conciencia” (entendiendo a la conciencia como compuesta por mente, inteligencia y ego). Patañjali expone que el fin último de la práctica es la ecuanimidad, serenidad de la conciencia.
Invocación a Patañjali
Cantamos la invocación al comienzo de la clase para lograr, desde nuestro interior, un sentimiento de santidad y una actitud de entrega; porque nada puede aprenderse en este mundo a menos que tengamos humildad. Al comenzar nuestra práctica, desde el momento en que pensamos en el Señor Patañjali, nos reconocemos muy pequeños delante de esta inmensa Alma. Sólo luego de haber comprendido esto, los problemas que normalmente surgen durante la práctica, principalmente los relacionados con el ego, se verán afectados. Sabemos que descendemos para aprender algo, ya que nada puede aprenderse sin esta actitud. Si pensamos que estamos en la cima y que sabemos todo, entonces no somos aprendices. En este sentido, el canto nos ayuda. (Adaptación de una entrevista dada por Geetaji en el RIMYI, en 1997, durante un Seminario Intensivo.)
Fuente:
• Iyengar, B.K.S. (2014). La Esencia del Yoga - Astadala Yogamala - Vol. VI. Barcelona: Kairós.
• Iyengar, B.K.S. (2003). Luz sobre los Yoga Sutras de Patañjali. Madrid: Kairós.